viernes, 16 de septiembre de 2022

De la enseñanza y el aprendizaje 👨‍🏫

 


Presentación

El proceso de enseñanza aprendizaje es sin duda alguna, de los fenómenos más estudiados desde la antigüedad hasta nuestro siglo. En el siguiente análisis se expone de forma ensayística la relación epistemológica entre las distintas doctrinas tales como; La teoría cognitiva, la conductista, la asociacionista y la estructuralista. El interés principal es abordar la problemática de la enseñanza y el aprendizaje como problema motor dentro de los postulados expuestos en variadas obras de carácter científico y psicológico para esclarecer el rol que cada elemento toma en el momento que se da el fenómeno educativo, el acto de enseñar y el de aprender.


Análisis del proceso enseñanza aprendizaje

 

La educación como advirtió Gustavo Bueno[1]; “es un proceso complejo (no simple) que comprende múltiples componentes, implica muchos pasos, tanto por parte de quienes educan como por parte de los que están siendo educados”. Dicho proceso es el que engloba dentro de sus factores tanto el de la enseñanza como el del aprendizaje, y como todo proceso de evidente origen fenomenológico requiere de un minucioso análisis para poder apreciarlo a profundidad.


La enseñanza y el aprendizaje en la Teoría Cognitiva

     Teoría cognitiva es el nombre acuñado a las teorías del desarrollo cognitivo propuestas por el psicólogo suizo Jean Piaget quien en su obra científica vislumbró una propuesta orgánica de los procesos mentales en determinadas etapas del niño y por ende su capacidad de asimilación y abstracción. La teoría cognoscitiva de Piaget es una de las más citadas y controvertidas. Piaget contribuyó a modificar el rumbo de las investigaciones dedicada al estudio del desarrollo del niño, (Linares, 2008). Esta teoría explora el esquema mental y la explica en una serie de etapas por las cuales el niño va conociendo su mundo y explorándolo. A lo largo de su vida Jean Piaget se interesó muchísimo en el aprendizaje de los niños y cómo estos actuaban como pequeños científicos. ¿Cuál es el fin de esta enseñanza? ¿Acumular conocimientos útiles (y útiles, ¿en qué sentido?)? ¿Aprender a aprender? ¿Aprender a innovar, a producir algo nuevo en cualquier campo, tanto como a saber? ¿Aprender a controlar, a verificar o simplemente a repetir? (Piaget, 2001). Para Piaget el aprendizaje está vinculado a las etapas del desarrollo, los niños a muy corta edad comienzan a interesarse por su entorno. A medida que el niño va pasando sus etapas, mejora su capacidad de emplear esquemas complejos y abstractos que le permiten organizar su conocimiento, (Linares, 2008).

La obra de Piaget se vio comparada por los escritos que desde la Rusia soviética llegaba a Europa y América de otro gran psicólogo como lo fue Lev Vygotsky. Prolífico escritor y científico educativo propuso una de las teorías más sobresalientes de la primera mitad del siglo XX, la Teoría sociocultural del desarrollo. Para Vygotsky la enseñanza y el aprendizaje forman parte de la estructura lingüística del individuo; el desarrollo del pensamiento está determinado por el lenguaje, es decir, por las herramientas lingüísticas del pensamiento y la experiencia socio-cultural del niño. Esencialmente, el desarrollo del lenguaje interiorizado depende de factores externos (Vygotsky, 1995). Tanto para Piaget como para Vygotsky, los procesos de enseñanza aprendizaje se van dando en diferentes etapas del desarrollo del infante hasta convertirlo en un adulto y cuya experiencia no se aleja de factores lingüísticos y escolares, por el contrario, forman parte esencial del cuerpo de ambas doctrinas.


La Teoría conductista

     Según la tradición; La Teoría conductista tiene su origen en un artículo publicado por John B. Watson a la edad de 35 años. Fue un trabajo polémico, de gran influencia en la comunidad científica y dio origen a una de las llamadas “escuelas psicológicas”, el conductismo (Ardila, 2013). El conductismo tuvo gran apoyo y recepción en las áreas académicas orientadas a las ciencias sociales como la psicología y la pedagogía: en ellas el desarrollo teórico y práctico tendría su mayor cabida. De acuerdo a Watson, la psicología no debía usar el estudio de la conciencia y la introspección como método de trabajo, de ahí podemos afirmar que el conductismo aplicado a las referidas áreas de la educación sostenga que la modificación observable de la conducta refiere a su vez una modificación de las estructuras cognitivas, es decir, la enseñanza y el aprendizaje. Lo que el organismo aprende, bien sea a lo largo de su vida o en las situaciones experimentales de condicionamiento, son relaciones entre estímulos y respuestas (Pellón, 2013). Tanta fe tenía sobre sus postulados que llegó a decir que si le daban varios niños sanos él haría de ellos lo que quisiera, podrían ser médicos o abogados. Como cita Pellón; Dadme una docena de niños sanos, bien formados y con mi ambiente específico para educarlos en él, y garantizo poder tomar cualquiera de ellos al azar y entrenarlo para que sea especialista en lo que yo seleccione —médico, abogado, artista, mercader, e incluso pedigüeño o ladrón— sin importar sus talentos, inclinaciones, tendencias, habilidades, vocación o quiénes fueron sus antepasados (Watson, 1924/ 1955).

     El conductismo en la educación tuvo gran alcance y muchos planes y programas de estudio emularon la propuesta y la adaptaron a sus contextos sociales y urbanos, teniendo como resultado una enseñanza donde los elementos de estímulo respuesta eran eje axial del proceso educador. Watson creía que el hombre puede modificar su conducta sin otro reparo que el del mundo externo. Los seres humanos se pueden modificar – en sentido adaptativo o no adaptativo – y no están a merced de contingencias biológicas, genéticas en términos contemporáneos (Ardila, 2013).


La teoría Asociacionista en el proceso enseñanza aprendizaje

     La Teoría Asociacionista o también llamada de la asociación conductual es una variante en psicología y filosofía empírica que explica determinados cambios de conocimiento epistemológico circunstancial y directamente relacionada con un conocimiento que antecede a otro que lo sucede. Uno de los principales discípulos de Platón fue el primero en abordar la temática en cuestión. Aristóteles disfrutaba de observar y clasificar a los seres vivos. También gustaba de hacer disecciones que le aportaban gran variedad de conocimientos. Los temas que más lo atrapaban eran la botánica y la anatomía. Para él el conocimiento se encontraba en la experiencia sensorial. A este tipo de conocimiento se lo denomina asociacionista, porque se generan nuevos conocimientos a partir de las asociaciones que logra con imágenes que provienen de los sentidos y de la experiencia (Orozco, 2009).

     Al igual que el conductismo clásico, el asociacionismo y su teoría comprende los procesos de alcance pedagógico como muestra del accionar de un individuo en relación compleja con los estímulos que lo rodea, o que son parte de su operación. El ser capaz de aprender cuando lo hace aprende a aprender, sugiere entonces el asociacionismo una especie de metacognición conductual del aprendizaje. Como señala Álvarez Arboleda (2007); Para este modelo, la asociación E » E puede explicarse a través de diferentes leyes basadas en la descripción de dichas asociaciones. La más importante de ellas es la ley de la contigüidad. Ésta plantea que si los centros de actividad en el cerebro producidos por los estímulos, son activados regularmente de forma conjunta, cuando un centro es activado, el otro también se activará, (Leahey & Harris, 1998).

     Según esta idea, el individuo que inmerso está en un proceso educativo, aprenderá algo en relación a lo aprendido anteriormente, y así sucesivamente como parte de una asociación. Un ejemplo claro sería las matemáticas básicas de primaria; el alumno que vaya aprender a sumar, primero debe ya conocer los números, y el aprende a dividir por ende debe saber multiplicar antes. Cuando esto no ocurre, los alumnos o los educandos no logran comprender que la suma es equivalente a una multiplicación y que la resta a la división.


El estructuralismo en el proceso enseñanza aprendizaje

     El estructuralismo nace a principios del siglo XX. Muchos estudiosos afirman que ya en Marx está presente un pensamiento estructuralista, a pesar de ello el punto de partida sería una serie de conferencias que Ferdinand de Saussure diera y cuyos discípulos publicaran en 1915 bajo el título de Cours de linguistique genérale, (Curso de lingüística general). Las ideas de De Saussure y la profunda renovación que ellas produjeron en el estudio de las ciencias del lenguaje son sobradamente conocidas por quienes se han preocupado de estas materias desde la publicación de la obra mencionada (Domínguez, 2009). El estructuralismo concibe cualquier objeto de estudio como una totalidad y es así como la estudia. En esa directriz, la educación es un todo, y sus partes (la enseñanza-el aprendizaje) son parte fundamental de la existencia de ese todo, -educación-, y responde directamente a factores externos; la sociedad, el ambiente, el entorno. Dentro del proceso de enseñanza aprendizaje, tanto alumnos como maestros infieren un papel único, cuya modificación altera el rumbo del fin educativo. He allí la tesis central del estructuralismo; no hay todo sin partes, ni partes sin el todo.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 Bibliografía

ALVAREZ ARBOLEDA, LINA M. El estudio del aprendizaje desde el modelo asociacionista y el modelo funcionalista: un recorrido histórico. Informes Psicológicos, No. 9 p. 121-134 Medellín – Colombia. Ene-Dic de 2007, ISSN 0124-4906. Disponible en:

file:///C:/Users/Usuario/Downloads/Dialnet-ElEstudioDelAprendizajeDesdeElModeloAsociacionista-5229791.pdf

ARDILA, RUBÉN (2013). Los orígenes del conductismo, Watson y el manifiesto conductista de 1913. Revista Latinoamericana de Psicología, 45 (2),315-319. [fecha de Consulta 20 de Agosto de 2022]. ISSN: 0120-0534. Disponible en:   https://www.redalyc.org/articulo.oa?id=80528401013

Domínguez Llera, Manuel. Apuntes acerca del estructuralismo en la enseñanza. Universidad de Las Palmas de Gran Canaria. ULPGC, Biblioteca universitaria 2009. Recuperado de:

https://accedacris.ulpgc.es/bitstream/10553/4006/2/0234349_00006_0002.pdf

LINARES, RAFAEL, A. Desarrollo Cognitivo: Las Teorías de Piaget y de Vygotsky. Colegio Oficial de Psicólogos de Cataluña. Universidad Autónoma de Barcelona. Pp. 1-29. Recuperado de:

http://www.paidopsiquiatria.cat/files/teorias_desarrollo_cognitivo_0.pdf

OROZCO, E. (2009). Las teorías asociacionistas y cognitivas del aprendizaje: diferencias, semejanzas y puntos en común. Revista Docencia e Investigación. Pp. 1-18 Recuperado de:

https://ruidera.uclm.es/xmlui/bitstream/handle/10578/8200/Las%20teor%C3%ADas%20asociacionistas%20y%2...

PELLÓN SUÁREZ DE PUGA, RICARDO (2013). Watson, Skinner y Algunas Disputas dentro del Conductismo. Revista Colombiana de Psicología, 22 (2),389-399. [fecha de Consulta 20 de Agosto de 2022]. ISSN: 0121-5469. Disponible en:   https://www.redalyc.org/articulo.oa?id=80429824012

PIAGET, JEAN. Psicología y pedagogía, Crítica editorial, España, 2001, pág. 17-18

VYGOTSKY, LEV. Pensamiento y lenguaje, Ediciones Fausto, 1995, pág. 44

 

 

Antonio Pérez-Paredes

Licenciado en Pedagogía por la Universidad del Sur. Ha participado como ponente en la Embajada Mundial de Activistas por la Paz (EMAP) en varias ocasiones; “Foros universitarios; El holocausto y su impacto en los derechos humanos (2013)” “El genocidio y otros delitos competencia de la Corte Penal Internacional (2014) como moderador en la Universidad Tec-Milenio” “Alianza Internacional Universitaria por la Paz (2015) en la Universidad Politécnica de Quintana Roo” “ Educar para recordar: El holocausto y los derechos humanos (2016) en la Universidad del Sur”. En 2018 participó en el “Simposio de Autonomía Curricular, realizado en el Tec-Milenio” en 2019 recibió la certificación de competencia laboral en el “Uso didáctico de las tecnologías de información y comunicación en procesos de aprendizaje” y en 2020 la constancia en su participación del curso “Convivencia escolar desde la perspectiva de los derechos humanos (por la CNDH)”. En 2021 fue conferenciante en la semana de la Pedagogía con la ponencia "La pedagogía en la Grecia clásica". Concluyó el Taller "Evaluación diagnóstica para alumnos de educación básica" en 2021 y en 2022  recibió la certificación por el curso "Herramientas para una educación inclusiva, Dislexia; desde al aula al mundo del trabajo. Fue profesor de primaria en el Colegio Mano Amiga Cancún (2015-2021), actualmente es docente de licenciatura en la Universidad del Sur y en la primaria "Tulúm" también en Cancún.

 



[1] Opúsculo del Congreso celebrado en Granada y posteriormente publicado, ¿Qué es la filosofía? (1995). Oviedo, España, Pentalfa ediciones. 


lunes, 15 de agosto de 2022

Brevísima revisión de la sociología de Comte a Marx 📝

 




Auguste Comte

          Auguste Comte fue un filósofo francés y una de las máximas figuras del pensamiento europeo. Fundó el positivismo con la aparición de sus Cursos de filosofía positiva que rápidamente lo convirtieron en un personaje famoso en los círculos intelectuales. Propuso un esquema que explicaba el desarrollo del espíritu positivo en la historia de la sociedad. El primer momento de dicho esquema era el Teológico en donde Dios o los dioses son causa de los fenómenos naturales, segundo el Metafísico en donde los hombres se preocupaban por hallar ellos mismo las causas y por el último el Positivo, que sería la etapa de una conciencia científica.

          También inventó la sociología, a la que llamó “física social” en primera instancia. Para Comte el estudio de la sociología era sumamente importante ya que pensaba que con ella las sociedades podrían encontrar una nueva dirección para su bienestar. Comte tuvo gran influencia de las ciencias naturales de su época, muy en auge por esos tiempos, tales como la Química, la Física y la biología. Creía que aquel sistema homogéneo de las disciplinas naturales podía aplicarse al estudio de los hechos sociales y las cosas como sujetos. Posterior a 1839 Comte, propuso las “primeras concepciones de una nueva ciencia que denominó ‘sociología’ para estudiar y conocer la llamada sociedad” (Castro, 2016).

          Para Comte la disciplina sociológica significaba el comienzo para el estudio riguroso de lo que presentaba como la ciencia del siglo, descubierta por él y definida por sus concepciones positivas. Advirtió que la sociología servía para modelar nuevos aspectos de las sociedades del mundo alejados del autoritarismo y las revoluciones.


Emile Durkheim

          Si Comte fue el que acuñó el término sociología, Emile Durkheim fue quien verdaderamente sentó y fundó la sociología. Durkheim fue posterior a Comte algunos años, lo que aprovechó para desarrollar la ciencia en moda de su tiempo. Fue el primero en fundar un departamento en Francia para estudiar la sociología, igual creo una revista y escribió, escribió mucho y entorno a la sociología. En Las reglas del método sociológico dice: “El grupo piensa, siente, actúa de un modo distinto de cómo lo harían sus miembros si se encontraran aislados”. El primer capítulo de Las reglas del método sociológico suele ser la pieza de referencia obligada en la mayoría de ellos. Rápidamente, se les dice a los estudiantes que para Durkheim un hecho social es algo exterior al individuo y que se le impone, (Lorenc Valcarce, 2014).

          Para Durkheim, los hechos sociales son cosas en la naturaleza unidas por una ley de causalidad que las rigen porque un hecho es igual a una cosa. Dicha cosa se puede ya investigar como señaló Comte. En la sociedad dice Emile, existen muchos ejemplos de cómo los signos sirven para el día a día, y las relaciones personales se conecten. Las reglas de la sociedad no están dadas porque sí, tienen un sentido social en su propia fundamentación. Es por ello que, si yo no me someto a las convenciones del mundo, si al vestirme no tengo en cuenta los usos vigentes dentro de mi país y de mi clase, la risa que provoco, el alejamiento en el que se me mantiene, producen, aunque en forma más atenuada, los mismos efectos que un castigo propiamente dicho, (Durkheim, 2001).

          La sociología era muy importante para Durkheim pues consideraba con honestidad que a la sociedad podía entendérsele comprendiendo la naturaleza de sus hechos y sus relaciones.


Herbert Spencer

          Spencer es uno de los pensadores más prominentes de los últimos siglos. Radicó en él la reflexión de la naturaleza, lo natural y lo social. Estudió los procesos evolutivos y los sociales y defendió la idea de una ley general de la evolución o ley de la evolución de alcance cósmico. Para Herbert lo importante no era la mejora de la sociedad como objetivo de la sociología, sino el hecho de comprenderla. Con sus conocimientos sobre biología que recién había comenzado a surgir y popularizarse con el libro de Darwin, Spencer creyó que podía explicarse del mismo modo el desarrollo o evolución de una sociedad.

          Así como evoluciona una nebulosa y se convierte en una estrella así evoluciona una tribu a una sociedad. Spencer explica dinámicamente la constitución y los procesos de todos los sectores del Universo como producto de la ley general de la evolución. Esta ley consiste en que “de la homogeneidad indefinida e incoherente se va pasando a la heterogeneidad coherente y definida”, (Azuara Pérez, 1998).

          Para Spencer la sociología es importante en tanto que su comprensión implica comprender la evolución, la evolución de la misma, como si se tratara de la metamorfosis de una rana donde del huevo pasa a larva y de larva a renacuajo hasta convertirse en una rana, de la misma forma, si la sociedad tiene en su estructura ese dinamismo de la ley general de evolución, la sociedad puede comprenderse en términos de evolución.

          Para Spencer existían 3 tipos de evolución, 1-la inorgánica, 2-la orgánica y 3-la superorgánica. Siendo esta última la que corresponde a las sociedades. La evolución superorgánica estudiaría el cambio y la evolución de cómo una sociedad progresa en la historia de la humanidad.


Max Weber

          Weber fue unos de los primeros pensadores alemanes en estudiar a fondo la sociología, aunque en un principio él nunca se nombró sociólogo sino historiador, ya al final de su vida reconocería que si trabaja de sociólogo entonces eso lo hacía sociólogo. Desarrolló distintos campos científicos como la sociología, la historia y la filosofía, fue un riguroso defensor del antipositivismo y de desenmascarar los conceptos colectivos. Para Max Weber lo importante era saber qué es una relación social, en qué consiste y cómo es directamente proporcional al hecho social de Durkheim.

          Con Weber se cierra un período histórico de alumbramiento y conformación, que se extiende a principios del siglo XX. Con él la sociología entra en una etapa de adultez, hecho que se concreta con el discurso teórico sobre la identidad científica del sociólogo, superándose en este pensador la visión positivista que hacía de la sociología una ciencia imitativa de las ciencias naturales, (Fleitas Ruiz, 2005).  Como vemos, la entrada de la sociología en el siglo XX no es sin la labor de Weber un hecho reformista, pue él inaugurará nuevos horizontes en el campo sociológico que superaron por mucho al propio fundador y el mismo Spencer.

          Es Weber el iniciador de la teoría sociológica de la acción social, con la cual pretendía romper con las reducciones biologicistas del conductismo de la época y los determinismos culturalistas de las perspectivas socioantropológicas del estructural funcionalismo (Muñoz, 2017). Con Weber se inicia el despertar de la sociología como una ciencia independiente a las naturales, por consiguiente, Weber ve en la sociología una importancia radical, la de comprender a las sociedades conociendo bien los hechos sociales que la conforman.


Karl Marx

          Es Karl Marx uno de los pensadores más influyentes e importantes de los últimos años. Su pensamiento enmarcado en obras de relevante importancia como los tomos del Capital o sus estudios sobre Hegel hacen de Marx un filósofo revolucionario. Sus aportes a la sociología son varios, pues su comprensión de la sociedad abarcó temas tan curiosos como el suicidio al igual que lo hiciera Durkheim. Fundador del llamado materialismo histórico, Marx propuso una teoría dialéctica de cómo las sociedades progresaban o mejor dicho cómo estas se sucedían una tras otra.

          Para Marx la sociedad es sobre todo una sociedad trabajadora, es decir que verá en el trabajo la parte medular de sus inquietudes. La organización del trabajo social ha implicado dos tipos de relaciones: por una parte, la explotación del trabajo de un tipo de individuos por otro, como producto de la diferenciación que representa la división social del trabajo y, para hacer posible la permanencia de esa relación, la imposición de un orden que representa la dominación de un tipo de individuos por otro, (Yocelevzky, 2001). La explicación que da Marx es dialéctica, referirá que si alguien tiene únicamente su fuerza de trabajo será empleado por quien tiene los medios de producción, el que trabaja genera aumento de capital y el patrón se enriquece sin que el empleado pueda cambiar su forma de vida.

          En el mundo que describe Marx, los cambios sociales son a su vez cambios de producción, es decir que los individuos están determinados más que por su orden social por el de producción. Por lo tanto, la sociología de Marx es una teoría del nuevo cambio de producción y distribución de la riqueza. Su importancia radica en que explica a la sociedad a partir de sus intercambios de fuerza de producción y trabajo.

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Bibliografía

Azuara Pérez, Leandro. (1998). Sociología, FCE, México, pág. 42

Castro, Pablo de Jesús. (2016). Evolución de la sociología. Futuro e historia. REVISTA DE MUSEOLOGÍA KÓOT, 2016 AÑO 6, n.º 7, ISSN 2078-0664, ISSNE 2378-0664

Durkheim, Emile. (2001). Las reglas del método sociológico, FCE, México, pág. 40

Fleitas Ruiz, Reina. (2005). La sociología política en Max Weber. La Habana, Cuba. STVDIVM Revista de humanidades, 11 pág.227-240

Lorenc Valcarce, Federico (2014). Émile Durkheim y la teoría sociológica de la acción. Andamios, 11 (26),299-322.[fecha de Consulta 28 de Julio de 2022]. ISSN: 1870-0063. Disponible en:   https://www.redalyc.org/articulo.oa?id=62841544011

Muñoz Gaviria, Diego Alejandro. (2017). Aportes sociológicos de Max Weber para la discusión de lo legal y lo legítimo en el marco de una teoría de la autoridad. Revista Ratio Juris Vol. 12 N.º 24 (enero-junio 2017) pp. 295-318

Yocelevzky, Ricardo A. (2001). La explicación sociológica de Marx. Estudios Sociológicos, XIX (3),635-640.[fecha de Consulta 28 de Julio de 2022]. ISSN: 0185-4186. Disponible en:   https://www.redalyc.org/articulo.oa?id=59805703





Lic. Antonio Pérez-Paredes

Licenciado en Pedagogía por la Universidad del Sur. Ha participado como ponente en la Embajada Mundial de Activistas por la Paz (EMAP) en varias ocasiones; “Foros universitarios; El holocausto y su impacto en los derechos humanos (2013)” “El genocidio y otros delitos competencia de la Corte Penal Internacional (2014) como moderador en la Universidad Tec-Milenio” “Alianza Internacional Universitaria por la Paz (2015) en la Universidad Politécnica de Quintana Roo” “ Educar para recordar: El holocausto y los derechos humanos (2016) en la Universidad del Sur”. En 2018 participó en el “Simposio de Autonomía Curricular, realizado en el Tec-Milenio” en 2019 recibió la certificación de competencia laboral en el “Uso didáctico de las tecnologías de información y comunicación en procesos de aprendizaje” y en 2020 la constancia en su participación del curso “Convivencia escolar desde la perspectiva de los derechos humanos (por la CNDH)”. En 2021 fue conferenciante en la semana de la Pedagogía con la ponencia "La pedagogía en la Grecia clásica". Concluyó el Taller "Evaluación diagnóstica para alumnos de educación básica" en 2021 y en 2022  recibió la certificación por el curso "Herramientas para una educación inclusiva, Dislexia; desde al aula al mundo del trabajo. Fue profesor de primaria en el Colegio Mano Amiga Cancún (2015-2021), actualmente es docente de licenciatura en la Universidad del Sur y en la primaria "Tulúm" también en Cancún.

viernes, 4 de marzo de 2022

Algunas consideraciones sobre la educación en John Locke

 










Resumen

           La filosofía de la educación de John Locke es considerada como revolucionaria por las interpretaciones y aportaciones que hizo en materia educativa, con la publicación de su Ensayo sobre el entendimiento humano y su experiencia como docente, vio la luz Pensamientos sobre educación donde abordó las problemáticas pedagógicas de su tiempo con el rigor y erudición típicas de un filósofo inglés.

 

Palabras clave: John Locke, educación, experiencia, idea, conocimiento

 

Introducción

 

          El renacimiento fue época de grandes e innovadores cambios que determinaron el transcurso histórico de las ciencias, las artes, la medicina, las matemáticas y por añadidura la educación. La memoria colectiva y la sociedad estaban cambiando a pasos gigantescos, las nuevas rutas marinas expandían el conocimiento del mundo y asimilaban los nuevos tópicos resultados de la ilustración. Uno de estos grandes cambios lo protagonizó John Locke, exponente del empirismo inglés y una nueva visión de cómo se debía educar en su tiempo.

 

 

 

 

La educación renacentista en John Locke

 

          Fue John Locke hombre nacido en familia burguesa, tuvo desde su infancia una dura administración educativa estimulada por el padre quien era: Severo con él manteniéndole en un temor reverencial, (…) pero relajando gradualmente a medida que se convertía en hombre, hasta que, estando ya capacitado para ello, vivió perfectamente bien como un compañero, (Cranston, 1956). Estudió en la Public School de Westminster, en el Christ Church Oxford y Montpellier. Fue candidato en espíritu a la vida religiosa, que omitió cuando conoció los laboratorios, -entonces proliferantes-, de química y física. Estudió medicina, desempeñó cargos políticos, (consejero y secretario), luego se dedicó a la filosofía, vocación a la que se entregó sin reparo. Se consagró a la enseñanza privada, fue preceptor de los hijos de los Masham en Essex. Murió de un infarto el otoño de 1704.

          Para poder comprender los postulados o propuesta educativa de Locke, es menester primero tener un acercamiento preciso a la forma en la que, según John Locke, el hombre adquiría su conocimiento. La época de Locke: el siglo XVII, es un siglo ávido por descubrir, es la periferia del racionalismo descartiano, donde ya no bastaba con el (pienso luego existo) hacía falta demostrar por qué se pensaba, cómo se hacía y quién era el que existía. Las respuestas las brindará el inglés en su ya famoso y reconocido, Ensayo sobre el entendimiento humano, (An Essay Concerning Human Understanding) publicaba en 1690. Ensayo sobre el entendimiento humano rápidamente alcanzó popularidad, se convirtió en libro de texto en Oxford, Cambridge y de diferentes universidades escocesas. Se hablaba de él como el libro que sustituiría al de Aristóteles. El entendimiento precisa de la materia, aunque no se enajena del espíritu, pero enfatiza que es importante que el sujeto tenga una relación con el objeto. Locke es entonces un empirista, necesita de la correlación de la experiencia, no solo basta saber del objeto, hace falta verlo. Conocer es ver, es pura locura imaginarse que se puede ver, y comprender, con los ojos de otro, incluso aunque posea el don de las palabras para describirnos, si no poseemos nuestras propias impresiones de lo que ha pasado, si no lo hemos visto con nuestros propios ojos, si lo hemos leído simplemente, seguimos siendo tan ignorantes como antes (Locke, 2012). Por lo tanto, se deduce que, según su epistemología, el conocimiento del hombre proviene de las primeras impresiones, nacidas de nuestras percepciones, que las dota nuestros sentidos, y vamos generando ideas, de simples a más complejas.

          Locke llama idea a todo pensamiento o percepción, todo lo que es contenido de conciencia y menciona como fuente de todas las ideas a: la sensación o experiencia externa y a la reflexión o experiencia interna. De ellas emanan en orden; la idea de extensión, figura, color y aroma; los deseos, los sentimientos, las emocione y los estados anímicos.

          Como pensador educativo se preocupó por la clase menos privilegiada, los pobres. Para los pobres, para las clases obreras sugiere la creación de escuelas del trabajo, obligatorias a partir de los tres años de edad, (Mallinson, 2017). Fue de los pioneros en dar valor a la salud, exigiendo hábitos de higiene, así como del entrenamiento y ejercicios físicos.

          La propuesta pedagógica de John Locke no queda del todo separada de los grandes sistemas escolásticos como el de Vives o Comenio, hereda de ellos, el programa a medias, pues no cree que la enseñanza de las lenguas clásicas sea totalmente necesaria, más que la materna. El alumno de buena familia, que aspire a ser un caballero, deberá recibir primero, buenos ejemplos, deberá saber leer y escribir perfectamente. En la escuela se acercará a las ciencias por medio de un preceptor inteligente y hábil: Geografía (debe familiarizarse con el globo terráqueo) geometría (dice que bastarán los 6 libros de Euclides) la astronomía, historia, derecho natural y civil, moral. Sería estúpido, infiere, que un caballero ignoré cómo está gobernado su país. La educación que reciban los niños y jóvenes debe ser excelsa ya que, “un niño bien nacido no debe aprender pedanterías” y sobre esto se puede añadir, “El niño debe desde luego aprender a no herir el amor propio de sus semejantes, después a conducirse siempre en el mundo con soltura y afabilidad”. Por último, la enseñanza se nutrirá de asignaturas complementarias; danza, música, esgrima y equitación.

          En Pensamientos sobre educación, Locke abordó con gran erudición los problemas a los que la juventud escolar de su tiempo se enfrentaba, advirtiendo que el gran reto del educador es hacer que los alumnos se interesen por los temas. Para Locke, los niños personas razonables mucho antes de lo que uno se imagina, por lo que se les debía alejar de seres engañosos, embusteros y charlatanes, ya que siempre deberá pensar y obrar noblemente. Si bien Locke no fue pedagogo, sus ideas y reflexiones marcan un punto de partida entre el romanticismo de Rousseau y la objetividad de la experiencia. Es en Locke donde se hallan las primeras tendencias sobre el juego: no solo propone que aprendan a leer con juegos lúdicos, también que el alfabeto sea enseñado con juguetes educativos, se opondrá al castigo corporal como medio de disciplina y limitará los primeros años de lectura con las fábulas de Esopo.

          Locke fue un adelantado en materia educativa y un reformador pedagógico. Como vemos, la propuesta educativa de Locke es revolucionaria frente a la institucional de su tiempo, pues en la del filósofo inglés predomina el objetivo de crear buenos hábitos para fortalecer tanto el cuerpo como el espíritu (Silva, 2012.

Conclusión

          La gran influencia de Locke en materia educativa llegó hasta uno de los pensadores más importantes como lo fue Rousseau. La importancia de los aportes de Locke radica sin duda alguna en la originalidad en saber expresar con palabras e ideas claras grandes problemas antes considerados como propios de un instructor. Su valía consistió en saber diagnosticar las necesidades de su época y profundizar en ellas desde su trabajo como docente, para asimilar que la conciencia nunca está separada de la experiencia, y que el espíritu se nutre de las ideas de su tiempo.

 

Fuentes bibliográficas

 

CRANSTON, MAURICE (1956). Biografía sobre John Locke, Ensayo sobre el entendimiento humano, FCE, México.

LOCKE, JOHN, (2012). Pensamientos sobre educación, Madrid, Akal.

MALLINSON, VERNE, (2017). V. Los grandes pedagogos, Estudios realizados bajo la dirección de Jean Chateau, (V. John Locke),  México, FCE.

SILVA, CARMEN (2013). John Locke, Pensamientos sobre la educación, trad. La Lectura y Rafael Lasaleta, Akal, Madrid, 2012, 381 pp. (Básica de Bolsillo).. Diánoia, LVIII (71),184-187.[fecha de Consulta 20 de Enero de 2022]. ISSN: 0185


Lic. Antonio Pérez-Paredes

Licenciado en Pedagogía por la Universidad del Sur. Ha participado como ponente en la Embajada Mundial de Activistas por la Paz (EMAP) en varias ocasiones; “Foros universitarios; El holocausto y su impacto en los derechos humanos (2013)” “El genocidio y otros delitos competencia de la Corte Penal Internacional (2014) como moderador en la Universidad Tec-Milenio” “Alianza Internacional Universitaria por la Paz (2015) en la Universidad Politécnica de Quintana Roo” “ Educar para recordar: El holocausto y los derechos humanos (2016) en la Universidad del Sur”. En 2018 participó en el “Simposio de Autonomía Curricular, realizado en el Tec-Milenio” en 2019 recibió la certificación de competencia laboral en el “Uso didáctico de las tecnologías de información y comunicación en procesos de aprendizaje” y en 2020 la constancia en su participación del curso “Convivencia escolar desde la perspectiva de los derechos humanos (por la CNDH)”. En 2021 fue conferenciante en la semana de la Pedagogía con la ponencia "La pedagogía en la Grecia clásica". Concluyó el Taller "Evaluación diagnóstica para alumnos de educación básica" en 2021 y en 2022  recibió la certificación por el curso "Herramientas para una educación inclusiva, Dislexia; desde al aula al mundo del trabajo. Fue profesor de primaria en el Colegio Mano Amiga Cancún (2015-2021), actualmente es docente de licenciatura en la Universidad del Sur y en la primaria "El pípila" también en Cancún