jueves, 28 de mayo de 2020

Prolegómeno a la idea de “ambiente favorable”

   Hermenéutica de la pedagogía del ambiente





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"Conozco maestros que han leído decenas de disertaciones sobre
la atención, sus caracteres y sus leyes”.  "Muy bien. Pero su
problema es después . . . , conseguir, esta bendita atención. La regla es
suscitar el interés. ¡Bello descubrimiento, seguramente! ¡Pero del dicho
al hecho . . . ! El interés lo suscita sólo el que sabe, profundamente, aquello
que enseña; aquello que sabe como científico si enseña ciencias (aunque
se trate de los más elementales conceptos), como historiador, si
enseña historia, y así sucesivamente, etc.

Giuseppe Lombardo Radice, educador italiano



Un ambiente favorable siempre va unido a la idea de una educación de calidad. De este tema se ha hablado mucho y más desde el inicio del siglo XXI, donde parece ser que dadas las características de la vida misma, el enfoque por el que se mira y analiza es un referente directo del mundo inter-conectado que comúnmente se denomina, época digital.

     Coinciden y concluyen muchos especialistas en educación que la calidad solamente puede darse como consecuencia de un ambiente favorable para el aprendizaje, olvidan que un ambiente, es más que un espacio, circunstancialmente estructurado por ciertos fines, y que la distribución de los contenidos así como de los agentes, hace real el hecho fáctico de enseñar.

     Hasta aquí, se plantea el rumbo que deberá tomar la idea central, aunque es de suma importancia delimitar el concepto de calidad lo que interesa es el ambiente y cómo de esto puede darse, a juicio vivencial, la calidad como el resultado esperado ante el proceso de enseñanza  en un ambiente favorable para el aprendizaje, como “calidad” misma. Desde la praxis pedagógica se visualiza con mayor panorama con respecto a un ambiente favorable, el cual deberá ser un espacio que hace posible el conocimiento para todos, proceso del que es parte y a su vez deviene, dialécticamente, la educación.

     El docente es el agente del proceso, el que enseña, porque sabe, su posición frente al grupo es la del acreedor y poseedor de ciertos conocimientos que a primera vista pudiera tildarlo de sabio. Pero, ¿por qué es importante que el docente conozca a profundidad el contenido que imparte? Es importante porque su conocimiento será el primer referente de “la importancia de asistir a la escuela” que los alumnos deben identificar y seguir, emular, imitar y consolidar.

 

     Las estrategias que fomentan un aprendizaje significativo son aquellas que contribuyen a la participación e inclusión hasta tal punto que provocan armonía grupal, los alumnos se comienzan a relacionar de forma afectiva y efectiva, es decir, cambios drásticos, conductas y expresiones altisonantes con el diálogo y la convivencia sana.

     Un aula que congrega alumnos dispuestos a aprender fomenta una actitud colectiva que lleva a los agentes a madurar y razonar en la medida que el grupo se sigue desarrollando y avanza cognitivamente conforme el progreso, pase de individual a general. No hay que olvidar que el factor determinante y el que regula o puede propiciar esto es el docente, que frente a grupo tiene la plena obligación de acercar valores que se conviertan en una moral grupal, siempre con el precepto democrático de la libertad de participación. 

     Este paso fundamental para la labor docente es crucial ante los retos que el mundo dispone para la educación y el logro de sus fines. Para esto, recalco, es axial la coordinación pedagógica entre temas, contenidos y la planeación, ya que este es un instrumento que consolida lo inmaterial como sería el saber del maestro y lo material como lo sería las asignaturas y su correspondiente vaciado de información. Van de la mano en conjunto con los trabajos transversales, muy en uso en este tiempo.

    Las estrategias que fomentan la educacional emocional están ligadas a las nuevas exigencias que ante la realidad suponen una solución frente a los desastres educativos de antaño, muchos de estos desastres originados porque no existía una amplia valoración de la importancia que significa que un alumno aprenda porque puede aprender.     

     Estas nuevas exigencias traen progreso a la idea de “estrategia” que va perdiendo un significado didáctico –sin dejar de serlo-, y pasa a tomar una conceptualización orientada y encaminada a la búsqueda de oportunidades educativas, ya que si un docente emplea una estrategia y da resultados esperados o favorecedores puede aplicarse a todos los niveles y a los alumnos para su comprobación, (método prometeico). El ejercicio de compartir estrategias dentro de una escuela y como parte de la comunidad escolar, supone una buena relación del estar-colegiado ya que tanto maestros como directivos tienen la responsabilidad de crear este sistema que crece en la medida que: aplica, comparte y comprueba.    

     Lograr que los alumnos consoliden su objetivo es hacer que por medio de sus conocimientos y habilidades, y la interpretación de la realidad áulica adquieran y hagan propio los saberes que se les inculca a manera de enseñanza. Que en ellos la noción de aprender sea a su vez, la consciencia de aprendizaje. Que las estrategias generen un ambiente donde los educandos desarrollen una capacidad dialógica y práctica, encaminada en su propio beneficio, el beneficio de estar educado en un sistema educativo que tiene de antemano, un perfil de egreso del estudiante. Dicho perfil muchas veces no se cubre y el alumno se convierte en una estadística más.

     Un ambiente favorable, es el resultado de un conjunto de facultades y dinámicas propias de un lugar donde se asiste para “aprender” este aprender debe ser asimilado, analizado y retribuido en forma dialéctica, aunado a la actividad del docente que debe hallarse como el único que puede llegar a transformar y sobre todo hacer brotar de las semillas que llamamos alumnos, en frondosos árboles de frutos que posean los atributos de una persona apta para desarrollarse en el mundo que a su vez dispone de medios para educarlo, para hacerlo parte-de-él.  

Antonio Pérez-Paredes

Profesor de Primaria y Universidad.


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